Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, ordenó el miércoles 18 de noviembre la revisión de las relaciones con Estados Unidos tras la supuesta filtración de documentos que probarían que la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense espió a empleados de Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA), también se habla de que interceptaron incluso llamadas y correos electrónicos del anterior ministro de Energía y Petróleo venezolano, Rafael Ramírez.
Según Maduro, los documentos fueron dados a conocer por el agente Edward Snowden, a la vez que también por por otros agentes de la NSA. En ellos han desvelado que las agencias de inteligencia estadounidenses y la embajada de USA en Caracas espiaron a 10.000 trabajadores de la industria petrolera venezolana.
Maduro ha ordenado una investigación e instado a la canciller, Delcy Rodríguez, a que cite a lo largo del jueves a Lee McClenny, Encargado de Negocios de Estados Unidos, para hacerle entrega de una protesta. También ha ordenado iniciar una revisión integral de la relación con el gobierno de Estados Unidos, “porque Venezuela se respeta", aseveró el presidente Maduro.
De acuerdo con versiones de Telesur, importante cadena televisiva de Venezuela, financiada en su mayoría por el gobierno del país sudamericano, la NSA espió comunicaciones internas, correos electrónicos, perfiles de empleados y otros datos de PDVSA, incluyendo en le escrutinio a funcionarios de alto nivel como Rafael Ramírez". El documento fechado, de marzo de 2011, está etiquetado como "ultra secreto" y fue proporcionado por Edward Snowden, ex contratista de la NSA, y obtenido por Telesur.
Según el presidente venezolano el espionaje tendría como propósito "sabotear la industria petrolera” venezolana por ser "la columna vertebral” de la economía del país y "derrocar el gobierno" del presidente Hugo Chávez, ya fallecido. “Los estadounidenses se han acostumbrado a espiar al mundo.” Según Maduro. "Iré anunciando las decisiones que vaya tomando para que el gobierno de los Estados Unidos pida perdón al pueblo de Venezuela por este agravio.”
La denuncia se produjo una semana después que dos sobrinos de la primera dama de Venezuela, Cilia Flores, fueran acusados de narcotráfico en la ciudad de Nueva York. Efraín Campos y Francisco Flores quedaron detenidos sin fianza después de ser arrestados en Haití bajo cargos de intentar introducir 800 kilos de cocaína en Estados Unidos. Este arresto ha reforzado las acusaciones estadounidenses de narcotráfico a los más altos niveles del gobierno de Maduro.
Las relaciones entre ambos países entraron en crisis en marzo después de que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, declarara a Venezuela una amenaza para la seguridad nacional de los Estados Unidos y decidiera congelar los bienes de siete funcionarios del país por supuestas violaciones de los derechos humanos y corrupción.
Caracas y Washington iniciaron en abril un proceso de acercamiento mediante la visita al país del diplomático estadounidense Thomas Shannon. A pesar de estas fricciones, ambos países mantienen todavía un intenso intercambio comercial.
Fuente: Univisión