Científicos que buscan vida en otros planetas realizaron un espectacular descubrimiento acerca de cómo mueren los planetas.
Mientras los astrofísicos utilizaban el Telescopio Especial Kepler para observar a una estrella muerta en la constelación de Virgo, lograron ver el momento en que una enana blanca devoraba a los planetas cercanos, un fenómeno acerca del cual habían teorizado pero que nunca había sido visto antes, y que podría significar un vistazo de lo que depara al planeta Tierra en el futuro.
"Esto nos da una idea de lo que terminará ocurriendo a todos los sistemas solares" - señaló al periódico Daily News el autor del Centro de Astrofísica Harvard-Smithsonian, Andrew Vanderburg.
El objeto rocoso que se observa siendo destruido es un planeta menor, similar en tamaño a Ceres, un planeta enano ubicado en el cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter.
Los científicos observaron al planeta siendo destruido por una enana blanca (estrellas formadas por los restos del núcleo de una estrella que ha consumido todo su hidrógeno). La gravedad de dicho astro destrozó al planeta menor en muchísimos pedazos que continuaron girando alrededor de la estrella. Actualmente, su calor ha comenzado a vaporizar estos restos hasta transformarlos en polvo y gases que son absorbidos por la misma estrella.
El descubrimiento entrega un vistazo a un posible futuro de nuestro planeta. Dentro de 6 mil millones de años, el sol habrá consumido todo su hidrógeno, se expandirá y engullirá a Mercurio y Venus, según indicó Vanderburg. En este contexto, si la Tierra logra permanecer intacta, es posible que sea arrastrada por el tirón producido por la gravedad, destruyéndose de todas maneras.