La hija que Rosie O'Donnel adoptó en extrañas circunstancias, compartió un sentido abrazo con su madre biológica en una emotiva reunión, luego de haber estado separadas por 18 años.
Deanna Micoley condujo desde Wisconsin a Nueva Jersey para encontrarte con Chelsea O'Donnell en agosto, luego de que la chica cumpliera los 18 años y dejara la casa de los O'Donnell en South Nyack, N.Y. Chelsea sonrió y ambas se abrazaron y conversaron.
"Solo le dije que la amaba", comentó la madre Deanna Micoley con el Inside Edition acerca de este primer encuentro. "Siempre la quise y estoy tan feliz de que ahora sea parte de mi vida".
Ambas intercambiaron mensajes el año pasado a través de Facebook, pero no se conocieron hasta que Chelsea celebró su cumpleaños y alcanzó la mayoría de edad legal. La última vez que Micoley vio a Chelsea fue un poco después de su nacimiento en 1997.
Chelsea tuvo un verano difícil este año cuando escapó de casa de O'Donnell y desapareció por una semana, luego se mudó a la casa de Steven Sheerer de Jersey Shore, quien tiene 25 años.
Sheerer fue arrestado a finales de agosto por acoso a una menor de edad. Ambos se habían conocido a través de la red social Tinder.
Chelsea volvió a Wisconsin con Micoley luego de su primer encuentro y se quedó por seis días, aunque ya están en contacto. De todos modos, la madre asegura que su puerta está siempre abierta para su hija.
"Solo quiero ser parte de su vida", dijo. "Solo quiero acompañarla al altar. Quiero estar con ella el día de su boda. Quiero estar ahí cuando nazca su primer hijo".
Además, Chelsea reafirma que Chelsea habría sido adoptada ilegalmente, algo que O'Donnell niega por completo.
"No sé cómo puedes dormir tranquila sabiendo lo que me hiciste y lo que le hiciste a mi hija", le dijo la mujer a Inside Edition.
Chelsea asegura que su madre adoptiva la habría echado de su casa, y niega completamente las declaraciones de O'Donnell en las que asegura que la joven tendría una enfermedad mental.